The Prague Post - La desinformación sobre las vacunas, un efecto secundario duradero del covid-19

EUR -
AED 4.26841
AFN 80.362394
ALL 97.542216
AMD 446.735356
ANG 2.080099
AOA 1065.794205
ARS 1494.414015
AUD 1.776887
AWG 2.092071
AZN 1.980459
BAM 1.954642
BBD 2.348809
BDT 141.226338
BGN 1.956132
BHD 0.43854
BIF 3466.946195
BMD 1.162261
BND 1.493215
BOB 8.038238
BRL 6.486005
BSD 1.163311
BTN 100.147673
BWP 15.618748
BYN 3.807045
BYR 22780.325028
BZD 2.336716
CAD 1.596076
CDF 3354.287055
CHF 0.932807
CLF 0.029182
CLP 1120.296341
CNY 8.342655
CNH 8.346165
COP 4674.330945
CRC 587.052233
CUC 1.162261
CUP 30.799929
CVE 110.199718
CZK 24.634179
DJF 206.947405
DKK 7.463699
DOP 70.258379
DZD 151.514244
EGP 57.439973
ERN 17.433922
ETB 161.636047
FJD 2.620788
FKP 0.864949
GBP 0.866519
GEL 3.150183
GGP 0.864949
GHS 12.127816
GIP 0.864949
GMD 83.106172
GNF 10094.020343
GTQ 8.931709
GYD 243.385819
HKD 9.121487
HNL 30.445964
HRK 7.532663
HTG 152.739518
HUF 398.923459
IDR 18977.696027
ILS 3.908598
IMP 0.864949
INR 100.127437
IQD 1523.897249
IRR 48945.741055
ISK 142.354235
JEP 0.864949
JMD 186.029797
JOD 0.824089
JPY 172.932309
KES 150.300962
KGS 101.640213
KHR 4662.238109
KMF 491.989694
KPW 1046.046309
KRW 1616.942576
KWD 0.355234
KYD 0.969426
KZT 620.152624
LAK 25087.138481
LBP 104232.653
LKR 350.972086
LRD 233.241828
LSL 20.596898
LTL 3.431856
LVL 0.703041
LYD 6.327252
MAD 10.519168
MDL 19.788278
MGA 5176.933206
MKD 61.523554
MMK 2439.678938
MNT 4168.013035
MOP 9.404829
MRU 46.275587
MUR 53.119698
MVR 17.903172
MWK 2017.205016
MXN 21.777182
MYR 4.935007
MZN 74.338683
NAD 20.596898
NGN 1779.387897
NIO 42.814637
NOK 11.838157
NPR 160.236077
NZD 1.94976
OMR 0.446894
PAB 1.163311
PEN 4.140847
PGK 4.817146
PHP 66.377189
PKR 331.310933
PLN 4.244785
PYG 9003.666265
QAR 4.229694
RON 5.072695
RSD 117.080642
RUB 91.265035
RWF 1681.00418
SAR 4.36165
SBD 9.64543
SCR 17.082281
SDG 697.942292
SEK 11.245095
SGD 1.492813
SHP 0.913355
SLE 26.62005
SLL 24372.046713
SOS 664.806172
SRD 43.245469
STD 24056.466061
STN 24.485495
SVC 10.17897
SYP 15112.803405
SZL 20.592801
THB 37.628259
TJS 11.196867
TMT 4.079538
TND 3.419874
TOP 2.722137
TRY 46.947496
TTD 7.897322
TWD 34.181766
TZS 3030.404801
UAH 48.58252
UGX 4168.530579
USD 1.162261
UYU 46.882227
UZS 14725.276806
VES 135.943958
VND 30404.760344
VUV 138.92149
WST 3.080055
XAF 655.568644
XAG 0.030448
XAU 0.000347
XCD 3.14107
XCG 2.096558
XDR 0.815317
XOF 655.568644
XPF 119.331742
YER 280.163552
ZAR 20.586499
ZMK 10461.752209
ZMW 26.785133
ZWL 374.247723
La desinformación sobre las vacunas, un efecto secundario duradero del covid-19
La desinformación sobre las vacunas, un efecto secundario duradero del covid-19 / Foto: Allison ROBBERT - AFP

La desinformación sobre las vacunas, un efecto secundario duradero del covid-19

La pandemia de covid-19 ha constituido una caja de resonancia inédita para las redes de desinformación, ofreciendo a los escépticos de las vacunas una visibilidad y una popularidad de las que algunas figuras todavía se benefician cinco años después.

Tamaño del texto:

Efectos secundarios "peligrosos" o productos "nunca probados": los "antivacunas" no esperaron a 2020 para propagar información falsa sobre las vacunas.

Pero la aparición del covid-19 sirvió como un acelerador, "contribuyendo a transformar un movimiento marginal en una fuerza más poderosa", señala un estudio publicado en la revista The Lancet en 2023.

La pandemia dio a los escépticos de las vacunas la oportunidad de cambiar de estrategia.

Anteriormente dirigidos a los padres -los niños recibían el mayor número de inyecciones- sus discursos se generalizaron, permitiendo llegar a un público mucho más amplio.

"Durante este período observamos varias burbujas normalmente bien delimitadas convergiendo hacia el antivacunismo", describe Romy Sauvayre, profesora asistente en sociología francesa y especialista en creencias médicas.

Junto a los conspiracionistas habituales, adeptos de la medicina alternativa, personalidades políticas y también del ámbito médico han multiplicado declaraciones falsas o infundadas sobre las vacunas o sobre el propio virus.

Los debates en torno a la eficacia de la hidroxicloroquina como remedio contra el covid-19 promovido por el doctor francés Didier Raoult -cuyo estudio fundacional ha sido invalidado recientemente- agitaron a una parte de la población de ese país.

Como él, otras figuras con capital científico o médico se destacaron al oponerse al consenso científico.

"Detrás de estos médicos mediáticos a veces bastante radicales, se esconden en gran medida cuestionamientos sobre la confianza en las autoridades sanitarias", indica Jeremy Ward, investigador francés y coautor de un extenso informe sobre la vacunación en Francia desde 2020.

-Defensa de las libertades-

Más allá de las preocupaciones de salud, "este movimiento se ha estructurado principalmente en torno a la defensa de las libertades individuales", subraya Jocelyn Raude, investigador en psicología de la salud.

Lo demuestran las numerosas manifestaciones en todo el mundo contra las medidas de restricción y la obligación de vacunación.

La pandemia permitió así al movimiento antivacunas continuar su acercamiento a la derecha conservadora, impulsando a sus militantes a veces hasta las más altas esferas del poder político, de los cuales Robert Kennedy Jr es el mejor ejemplo.

Exabogado de derecho ambiental, el sobrino del asesinado presidente John F. Kennedy fue elegido por Donald Trump para dirigir el Ministerio de Salud de Estados Unidos.

Una victoria y un reconocimiento para los antivacunas con los que desfilaba en las manifestaciones, afirmando por ejemplo que el covid-19 fue un virus "étnicamente dirigido".

Según el Center for Countering Digital Hate (CCDH), una ONG que lucha contra la desinformación en línea, RFK Jr y su organización antivacunas Children's Health Defense -de la cual se ha retirado temporalmente- formaron parte de los doce principales difusores de desinformación durante la pandemia.

"Forma parte de las cuentas antivacunas que crecieron más rápido durante la pandemia. Estamos hablando de una audiencia de cientos de miles o de millones de personas. Es una posición muy sólida para construir una base de apoyo para sus ambiciones políticas", detalla Callum Hood, jefe de investigación de la CCDH.

-Antisistema y redes sociales-

Durante la pandemia, las redes sociales fueron "la punta de lanza de los intentos de desinformación sobre las vacunas", señala Noel T. Brewer, profesor en la escuela de salud pública de la Universidad de Carolina del Norte y uno de los autores del estudio publicado en The Lancet.

Pero las consecuencias en términos de salud pública son difíciles de analizar.

"Algunos investigadores creen que la exposición repetida a información falsa puede llevar a la gente a abstenerse de vacunarse, mientras que otros creen que los efectos de esta exposición son relativamente pequeños porque solo justificarían una vacilación previa a la vacunación", indica Jocelyn Raude.

Hoy en día, el movimiento se ha debilitado un poco con la disminución del interés por el covid-19, pero los que ganaron notoriedad desinformando durante la pandemia han aprendido a renovarse.

"Son las mismas cuentas las que ahora comparten contenido prorruso o escéptico sobre el clima", explica Laurent Cordonier, sociólogo y director de investigación de la Fondation Descartes.

"Hay un aspecto estratégico, pero también una verdadera coherencia al tocar estos diferentes temas que parecen no tener ningún vínculo entre si. El motor es el antisistema", explica el investigador.

T.Musil--TPP