The Prague Post - Miedo y trauma: cuando la caída deja cicatrices invisibles

EUR -
AED 4.241025
AFN 79.396131
ALL 97.193232
AMD 443.396204
ANG 2.06646
AOA 1058.805791
ARS 1567.418391
AUD 1.787121
AWG 2.08124
AZN 1.955468
BAM 1.951332
BBD 2.33146
BDT 140.767661
BGN 1.953664
BHD 0.435312
BIF 3442.627407
BMD 1.154641
BND 1.486757
BOB 7.996758
BRL 6.345166
BSD 1.154706
BTN 101.177575
BWP 16.503922
BYN 3.788062
BYR 22630.964184
BZD 2.319388
CAD 1.591961
CDF 3336.912549
CHF 0.935184
CLF 0.028437
CLP 1115.579221
CNY 8.288879
CNH 8.298093
COP 4732.0076
CRC 583.448823
CUC 1.154641
CUP 30.597987
CVE 110.015937
CZK 24.587737
DJF 205.620254
DKK 7.462422
DOP 69.489074
DZD 150.270947
EGP 55.942594
ERN 17.319615
ETB 160.060917
FJD 2.615957
FKP 0.869528
GBP 0.869641
GEL 3.117843
GGP 0.869528
GHS 12.12534
GIP 0.869528
GMD 83.714188
GNF 10015.804943
GTQ 8.862091
GYD 241.588887
HKD 9.063869
HNL 30.342993
HRK 7.532897
HTG 151.527773
HUF 399.135202
IDR 18906.32315
ILS 3.953373
IMP 0.869528
INR 101.383481
IQD 1512.736041
IRR 48639.253211
ISK 142.990862
JEP 0.869528
JMD 184.763716
JOD 0.818673
JPY 169.86389
KES 149.191393
KGS 100.97371
KHR 4630.236986
KMF 493.615716
KPW 1039.176927
KRW 1604.223511
KWD 0.353066
KYD 0.96228
KZT 623.970385
LAK 24981.713494
LBP 103460.509367
LKR 347.386481
LRD 231.541833
LSL 20.801167
LTL 3.409355
LVL 0.698431
LYD 6.308282
MAD 10.473308
MDL 19.744932
MGA 5123.179877
MKD 61.389427
MMK 2423.697739
MNT 4147.366962
MOP 9.33702
MRU 46.018428
MUR 53.806544
MVR 17.779732
MWK 2002.280369
MXN 21.82984
MYR 4.88471
MZN 73.851141
NAD 20.801707
NGN 1758.656995
NIO 42.491596
NOK 11.877319
NPR 161.871131
NZD 1.959455
OMR 0.443932
PAB 1.154756
PEN 4.137127
PGK 4.864734
PHP 66.498661
PKR 327.575013
PLN 4.275785
PYG 8648.820858
QAR 4.211765
RON 5.073844
RSD 117.125655
RUB 92.081096
RWF 1670.346203
SAR 4.33221
SBD 9.511208
SCR 16.964269
SDG 693.354907
SEK 11.180181
SGD 1.487264
SHP 0.907367
SLE 26.49905
SLL 24212.249631
SOS 659.877541
SRD 42.537193
STD 23898.738106
STN 24.443393
SVC 10.103689
SYP 15012.53592
SZL 20.801467
THB 37.371093
TJS 10.884043
TMT 4.05279
TND 3.404692
TOP 2.704285
TRY 46.975906
TTD 7.826942
TWD 34.540738
TZS 2895.892809
UAH 48.230623
UGX 4132.572764
USD 1.154641
UYU 46.435679
UZS 14694.351942
VES 145.62604
VND 30236.584647
VUV 139.233938
WST 3.204689
XAF 654.44707
XAG 0.030894
XAU 0.000343
XCD 3.120475
XCG 2.081099
XDR 0.813922
XOF 654.430105
XPF 119.331742
YER 277.51811
ZAR 20.724686
ZMK 10393.152073
ZMW 26.471238
ZWL 371.793941
Miedo y trauma: cuando la caída deja cicatrices invisibles
Miedo y trauma: cuando la caída deja cicatrices invisibles / Foto: Joe Klamar - AFP/Archivos

Miedo y trauma: cuando la caída deja cicatrices invisibles

La caída y después el miedo que, a veces, ya no desaparece nunca: en los deportes de riesgo como el esquí o el ciclismo, los accidentes dejan profundas huellas, no solo físicas, sino también psicológicas, al punto que algunos deportistas no vuelven a recuperar nunca su nivel.

Tamaño del texto:

¿Cómo subirse de nuevo a unos esquíes, a una bicicleta o una moto después de haber acabado en el hospital con huesos rotos y el cuerpo destrozado? ¿Cómo volver a ser competitivo, dispuesto a tomar riesgos para ello, después de haber rozado la muerte? Varios deportistas han tenido que plantearse cuestiones como estas tras una serie de accidentes escalofriantes en los últimos años.

Sólo en esquí alpino, la estrella estadounidense Mikaela Shiffrin se perforó la pelvis, la checa Terez Nova está en coma inducido, y el francés Cyprien Sarrazin sufrió una fuerte conmoción cerebral a finales de diciembre en Bormio.

Desde que comenzó la temporada, prácticamente no ha habido una prueba en la que algún participante no haya tenido que ser evacuado en helicóptero a un hospital.

Después de un accidente de esta gravedad el deportista inicia un largo recorrido de recuperación.

"Cuando te estrellas a 130 km/h, deja marcas en la cabeza. Sería simplemente mentirse a uno mismo decir que todo va bien", confía el esquiador francés Alexis Pinturault, 34 victorias en la Copa del Mundo, durante una entrevista con la AFP el 22 de enero en Kitzbühel.

Dos días más tarde sufrió una dura caída en el supergigante. Veredicto: fractura de la meseta tibial de la rodilla derecha. La temporada, y quizás incluso su carrera, terminada.

- 'Mi cuerpo decía que no' -

El doble campeón mundial de combinada ya había tenido que acortar su temporada hace un año después de romperse el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda en Wengen.

Al volver a esquiar, siente que algo anda mal. Tiene miedo: "Podía tomar más riesgos, pero había algo en mi cabeza que me frenaba. Mi cuerpo decía que no. Hay que reaprender que todo está bajo control. Necesariamente, lleva tiempo".

El ciclista belga Steff Cras también necesitó tiempo para asimilar su fuerte caída en abril pasado en la Vuelta al País Vasco, la misma que se llevó por delante a estrellas del pelotón como Remco Evenepoel y Jonas Vingegaard.

"A 20 centímetros de distancia, hubiera muerto", recuerda el ciclista, explicando a la AFP cómo esquivó un bloque de hormigón a más de 60 km/h.

Los daños fueron importantes. Un neumotórax, además de fracturas en las costillas y las vértebras, le impiden respirar durante treinta segundos.

Pero cuatro meses después encuentra la fuerza para terminar 16º en el Tour de Francia, aunque pagó un alto precio: "Presioné demasiado a mi cuerpo y me lo hizo pagar. Desarrollé un herpes zóster -enfermedad producida por una reactivación del virus latente varicela-zóster-".

"La cabeza, extrañamente, estaba bien. Sin embargo, quedé muy marcado por otra caída cuando choqué con un espectador en el Tour de Francia", en 2023, añade. "Después, mentalmente, estaba muerto. Tenía miedo de rodar en el pelotón con espectadores a lo largo de la carretera. Todavía lo pienso hoy".

- 'Desactivar el fantasma' -

Para superar su ansiedad, Steff Cras acudió a un psicólogo. "También hablo mucho con mi esposa. Para mí, eso es suficiente".

"El simple hecho de desmenuzar el evento traumático a veces puede ser suficiente", destaca Cécilia Delage, psicóloga deportiva que acompaña principalmente a la campeona olímpica de esquí de baches Perrine Laffont.

Pero la mayoría de las veces, este "estrés postraumático" requiere un trabajo psicológico más profundo "para que el miedo a lastimarse nuevamente no supere el deseo de rendir".

El riesgo es que se instale un círculo vicioso "y terminemos con atletas que se lanzan en un descenso a toda velocidad con los frenos puestos", el peor de los escenarios.

"Como cuando conduces un coche en la nieve. Si controlas tu conducción sin usar los frenos, llegarás a buen puerto. Si en cambio das un frenazo porque tienes miedo, te sales del camino", explica.

Existen varias técnicas, como el 'EMDR' (Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares), para tratar el problema.

"Cuando hay un trauma, significa que hay una información fantasma en el cerebro que puede desviar la decisión. A 100 km/h, eso se vuelve rápidamente peligroso. Hay que desactivar ese fantasma", explica Fabien Deloche, entrenador mental con sede en Annecy (sureste de Francia) que trabaja con esquiadores y ciclistas profesionales.

- 'Miedo a morir' -

El objetivo no es eliminar el miedo sino transformarlo. "Si desconectas el miedo, desconectas la prevención. Entonces hay que reconfigurarlo y usarlo para aumentar la atención y la conexión contigo mismo", insiste Deloche.

Muchos atletas también recurren a la hipnosis. Alexis Pinturault lo ha considerado. "Finalmente fui a ver a un médico que trabaja en el sistema vegetativo, en resumen, la memoria muscular. Hicimos ejercicios en estado de reposo, un poco de meditación. El objetivo es 'resincronizar' el cuerpo con el cerebro para retomar el control sobre el trauma".

Cécilia Delage insiste en que hay que "comprender la relación que tiene la persona con el miedo, el riesgo y por lo tanto con la muerte". Y para eso, a veces hay que remontarse "muy lejos, hasta el parto de la madre que tal vez salió mal".

"Tuve un caso donde el deportista tenía mucho miedo a sufrir un trauma craneal y no entendía por qué. Después de media docena de sesiones, tuvo un flash. Recordó que, de niño, se había golpeado la cabeza contra una roca en el mar y se había visto morir. Es un recuerdo que había olvidado por completo. La práctica del deporte reactivó su miedo a morir", relata.

Cuando el origen del miedo se identifica y se trata, puede comenzar un trabajo de preparación mental, basado principalmente en la visualización.

El ciclista español Enric Mas, paralizado después de tres caídas seguidas, logró así "salir del agujero", gracias a la ayuda de un psicólogo y un entrenador específico que lo hizo descender puertos en Andorra durante todo un verano.

- 'Harto de hacerme el duro' -

Antoine Dénériaz, campeón olímpico de descenso en 2006, nunca se recuperó de una gran caída en Are, Suecia, solo tres semanas después de su mayor victoria.

Cuando despertó en el hospital tenía "mucho miedo". Comienza entonces un calvario, carreras disputadas "con el freno de mano", un "estrés permanente" que a veces lo hace "llorar en medio de una comida". "Agotado", pone fin a su carrera un año después.

El ciclista Pierre Latour, de 31 años, también se lo plantea hoy. "Muero de miedo" en los descensos, reconoce el corredor del equipo TotalEnergies, desde que sufriera una fuerte caída en 2019. Ha probado de todo; psicólogo, hipnotizador, preparador mental, EMDR, entrenador de descenso, e incluso un sanador. Nada funciona.

"Te sienta bien durante un tiempo, pero a la menor contrariedad, todo explota en la cabeza, como un alcohólico que vuelve a tomar un trago", explicó al diario Le Parisien en 2023.

"Cada uno es diferente", resume Fabien Deloche. "Hay quienes han integrado perfectamente el riesgo. Otros decidirán que ya no pueden soportar ese estrés. Dicen: 'Vine a divertirme con los amigos y me encuentro cagando de miedo todos los días. Estoy harto de hacerme el duro'".

Las razones de la persistencia del bloqueo pueden ser múltiples. Quizás, la atención psicológica llegó demasiado tarde y se convierte en algo "como una fractura que no se cura, que se consolida como puede y luego te molesta de por vida", dice Cécilia Delage.

A veces el deportista desarrolla resistencias, añade la psicóloga: "Cuando considera que estamos abordando un terreno demasiado resbaladizo, que lo va a trastornar demasiado, como un mecanismo de defensa psicológica".

- 'Autosabotaje' -

"Generalmente, estos buscan soluciones alternativas como la acupuntura o la sofrología. Pero eso no resolverá el fondo del problema".

Sobre todo porque los resortes son a veces muy íntimos: "Al explorar el accidente, nos damos cuenta de que puede haber un autosabotaje. Tuve un ciclista cuyo miedo no era tanto hacerse daño como que su padre lo regañara. Que su padre le gritara: '¿Otra vez hiciste una tontería?'. El trauma a veces no está donde se cree".

En los deportes mecánicos también, la velocidad y el peligro forman parte de la vida cotidiana de los pilotos.

"Somos conscientes del peligro desde una edad temprana", explica el piloto australiano de Fórmula 1 Daniel Ricciardo.

"Pero nuestro deporte también se ha vuelto mucho más seguro a lo largo de los años", añade, haciendo referencia a la introducción en 2018 del halo -sistema de protección de la cabina de los pilotos-.

Esta barra de titanio, colocada sobre el 'cockpit', salvó a Romain Grosjean en 2020 cuando su monoplaza se estrelló contra una barrera de seguridad antes de incendiarse.

En un coche, "estamos en una célula de seguridad" bien protegida, recuerda a la AFP el piloto de rallies Adrien Fourmaux.

Aficionado de la bicicleta de descenso desde la infancia, prefirió optar por el rally, "menos peligroso".

Inspirándose en los deportes mecánicos, el esquí y el ciclismo trabajan para mejorar la seguridad, con airbags en particular, y entrar en una dinámica virtuosa: Menos caídas, menos lesiones. Y menos miedo.

M.Jelinek--TPP