

Cuatro personalidades brasileñas a seguir en la COP30
A menos de un mes de la COP30, su anfitrión Brasil espera mostrarse en la cita como líder de la lucha ambiental, para lo que cuenta con figuras en varios frentes.
Referentes brasileños del gobierno, la ciencia, el activismo y el arte marcarán el pulso de la conferencia climática de la ONU entre el 10 y el 21 de noviembre en la ciudad amazónica de Belém, corazón de la mayor selva tropical del mundo, clave contra el cambio climático.
- Marina Silva -
La ministra brasileña de Medio Ambiente, de 67 años, es reconocida en el mundo por su militancia por el medio ambiente y la preservación amazónica.
Criada en una explotación cauchera de la Amazonía, Marina Silva suele evocar a su abuela y a un tío chamán como primeras influencias en su adoración por la selva.
En 2008, abandonó el segundo gobierno de Lula da Silva por trabas a su agenda ambiental, aunque nunca dejó de defender al líder de izquierda y volvió a acompañarlo desde 2023.
Hoy enfrenta un escenario desafiante, con un agronegocio empoderado y un megaplan apoyado por Lula para la exploración petrolera en un área marítima cerca de la Amazonía.
"Todos vivimos contradicciones y esas contradicciones están siendo manejadas", dijo Silva este mes.
Sus reparos ante iniciativas con impacto ambiental le valieron críticas de propios y ajenos. Un senador de la base aliada gubernamental llegó a acusarla de "entorpecer el desarrollo del país".
- Carlos Nobre -
Luego de décadas investigando la Amazonía y el calentamiento global, el meteorólogo brasileño Carlos Nobre es una autoridad internacional sobre el clima.
Integró el Panel Intergubernamental del Cambio Climático de la ONU, un equipo de científicos premiado con el Nobel de la Paz en 2007 por señalar la amenaza ambiental.
"Los populistas y negacionistas climáticos, como el presidente estadounidense (Donald Trump) y nuestro expresidente (Jair Bolsonaro, 2019-2022), sostienen posiciones que almacenan el enorme riesgo del cambio climático", dice Nobre, de 74 años, a la AFP.
Nobre predijo hace 30 años el peligro de que la Amazonía se convierta en una sabana.
Ahora que atraviesa sequías históricas, este científico cree que con políticas ambientales adecuadas Brasil podría no sólo frenar la degradación, sino también ser uno de los primeros grandes emisores en cumplir las metas del Acuerdo de París.
"Brasil tiene todas las condiciones para liderar la transición energética", afirma.
- Txai Suruí -
En la COP26 en Escocia, en 2021, la activista indígena Txai Suruí se plantó ante el mundo con 24 años y un discurso contra "las emisiones de promesas mentirosas e irresponsables".
Cuatro años después, acaba de ser nombrada miembro de un grupo consultivo de jóvenes del secretario general de la ONU.
En Brasil viven cerca de 1,7 millones de personas indígenas, algunas en áreas protegidas que cubren una séptima parte del país. La preservación de estos territorios reduce la deforestación.
Hija de dos veteranos defensores de tierras del pueblo amazónico Paiter Suruí, Txai Suruí fundó el Movimiento de Juventud Indígena de Rondonia, su estado natal en el norte.
Cara joven del activismo indígena en Brasil, Suruí reivindica las tradiciones ancestrales y a la vez apuesta a la tecnología para combatir a invasores de tierras y "salvar la selva", según dijo a la AFP en 2023.
- Fafá de Belém -
Quien dice COP30 dice Belém, y en Brasil todos asocian esa ciudad a una artista: Fafá de Belém, cantora popular y activista por la Amazonía.
Con treinta discos grabados y millones vendidos, a sus 69 años sigue llenando recitales e inspirando a sus fans. En 2024, una de las principales escolas de samba del carnaval de Sao Paulo dedicó el desfile a su figura.
Maria de Fátima Palha de Figueiredo, conocida como Fafá de Belém, dará un show durante la COP con un ojo en el escenario y otro en las negociaciones: espera que los pueblos de la Amazonía estén "en el centro de las decisiones".
Hace tres años, en una reunión sobre acción climática en Nueva York, se indignó por la ausencia de representantes amazónicos. Entonces fundó Varanda da Amazonia, un foro de debate que convocó a más de mil pensadores amazónicos en su última edición.
"Cuando hablamos de cambio climático hablamos de datos, gráficos, informes científicos que son fundamentales, pero no siempre alcanzan a los corazones: el arte hace ese puente", dice Fafá a la AFP.
V.Sedlak--TPP