The Prague Post - Narrar con dignidad y respeto la eutanasia de una "mujer extraordinaria"

EUR -
AED 4.304872
AFN 79.965899
ALL 97.125019
AMD 446.577098
ANG 2.097965
AOA 1074.898555
ARS 1598.611316
AUD 1.789603
AWG 2.112872
AZN 1.997376
BAM 1.9557
BBD 2.354679
BDT 142.282703
BGN 1.957991
BHD 0.440777
BIF 3488.121114
BMD 1.17219
BND 1.504223
BOB 8.078586
BRL 6.347648
BSD 1.16914
BTN 103.189708
BWP 15.718194
BYN 3.950497
BYR 22974.921746
BZD 2.351279
CAD 1.621549
CDF 3370.046344
CHF 0.936053
CLF 0.028827
CLP 1136.571712
CNY 8.361055
CNH 8.352961
COP 4662.360894
CRC 592.369621
CUC 1.17219
CUP 31.063032
CVE 110.259345
CZK 24.39269
DJF 208.189323
DKK 7.468144
DOP 73.936208
DZD 152.0892
EGP 56.894082
ERN 17.582848
ETB 167.236523
FJD 2.640714
FKP 0.865674
GBP 0.867775
GEL 3.169438
GGP 0.865674
GHS 14.146275
GIP 0.865674
GMD 83.816091
GNF 10133.480311
GTQ 8.96654
GYD 244.597456
HKD 9.138514
HNL 30.630429
HRK 7.536951
HTG 152.802164
HUF 393.047445
IDR 19198.94647
ILS 3.922435
IMP 0.865674
INR 103.371328
IQD 1531.621452
IRR 49319.889825
ISK 143.183447
JEP 0.865674
JMD 187.070406
JOD 0.831129
JPY 172.786696
KES 151.282242
KGS 102.508456
KHR 4687.759591
KMF 492.910294
KPW 1055.010338
KRW 1625.245717
KWD 0.358128
KYD 0.97425
KZT 628.297778
LAK 25364.699188
LBP 104693.130882
LKR 353.011896
LRD 234.407979
LSL 20.66744
LTL 3.461172
LVL 0.709046
LYD 6.346675
MAD 10.625055
MDL 19.622994
MGA 5199.733335
MKD 61.536844
MMK 2461.015377
MNT 4215.456348
MOP 9.396018
MRU 46.869596
MUR 54.003232
MVR 18.063889
MWK 2027.196037
MXN 21.937773
MYR 4.9511
MZN 74.907305
NAD 20.66744
NGN 1793.450927
NIO 43.027793
NOK 11.779692
NPR 165.103533
NZD 1.989123
OMR 0.450307
PAB 1.16914
PEN 4.118089
PGK 4.87975
PHP 66.467508
PKR 331.750386
PLN 4.251254
PYG 8426.567849
QAR 4.273081
RON 5.078166
RSD 117.173991
RUB 95.15882
RWF 1693.413154
SAR 4.395986
SBD 9.639882
SCR 17.321412
SDG 703.904335
SEK 11.01308
SGD 1.506503
SHP 0.921157
SLE 27.25385
SLL 24580.233414
SOS 668.165734
SRD 45.571817
STD 24261.963978
STN 24.498744
SVC 10.229475
SYP 15240.810434
SZL 20.66094
THB 37.604284
TJS 11.048033
TMT 4.114386
TND 3.419025
TOP 2.74539
TRY 48.297158
TTD 7.934593
TWD 35.778991
TZS 2928.649806
UAH 48.191829
UGX 4112.789078
USD 1.17219
UYU 46.837598
UZS 14540.254313
VES 178.912011
VND 30945.812964
VUV 140.990019
WST 3.253432
XAF 655.923361
XAG 0.028581
XAU 0.000327
XCD 3.167902
XCG 2.106992
XDR 0.815758
XOF 655.923361
XPF 119.331742
YER 281.446998
ZAR 20.617273
ZMK 10551.119794
ZMW 27.912569
ZWL 377.444665
Narrar con dignidad y respeto la eutanasia de una "mujer extraordinaria"
Narrar con dignidad y respeto la eutanasia de una "mujer extraordinaria" / Foto: Simon Wohlfahrt - AFP

Narrar con dignidad y respeto la eutanasia de una "mujer extraordinaria"

Nacida hemipléjica y prácticamente ciega, la francesa Lydie Imhoff decidió que ya no quería "vivir en un cuerpo muerto" y optó este mes por someterse a la eutanasia en Bélgica, al término de un largo camino seguido por la AFP.

Tamaño del texto:

Dos periodistas -el fotógrafo Simon Wohlfhart y el videasta Dimitri Korczak- estuvieron a su lado durante casi un año, desde el día en que la mujer recibió la autorización para su eutanasia, en marzo de 2023, hasta sus últimos instantes en un hospital belga.

En este relato, los dos reporteros revelan los dilemas de semejante cobertura y la relación que fueron construyendo con Lydie.

- Primer contacto

Simon tuvo su primer contacto con Lydie en marzo de 2023, cuando ella viajó a Bruselas para una consulta con un psiquiatra, el primer paso para acceder a la eutanasia.

El estado de Lydie, de 43 años, se agravó tras un accidente durante un paseo a caballo, una actividad que le apasionaba.

Desde ese primer encuentro, Simon percibió el efecto "liberador" que tuvo para ella el visto bueno del psiquiatra.

A partir de ese momento, el fotógrafo fue descubriendo su personalidad y su gran sentido del humor.

Durante los 10 meses que pasaron entre esa primera consulta médica y la eutanasia, que tuvo lugar el 1 de febrero, Simon estuvo en contacto con ella a través de numerosas llamadas telefónicas y mensajes de texto.

"Me mandaba siempre mensajes con bromas y muchos memes, cosas humorísticas. También se burlaba de nosotros todo el tiempo, porque éramos sus paparazzi", contó el fotógrafo.

Para Simon, Lydie accedió a exponer sus últimos días ante las cámaras porque "no entendía por qué tenía que irse al extranjero" para poder acceder a la eutanasia.

"Creo que fue una forma de criticar esa situación" en su país, Francia, donde la eutanasia es ilegal.

- "Respetar su voluntad"

Durante todo ese proceso, Simon y Dimitri tuvieron tiempo para ponerse de acuerdo en qué mostrarían y qué no de los últimos momentos de Lydie.

Estaba claro que ella tendría "el control total de su imagen" y podía pedir en cualquier momento parar el reportaje, explicó Simon. "Era, básicamente, una cuestión de confianza".

"Claramente, un punto central era decidir si debíamos estar presentes en el momento de la inyección. Lydie no quería que estemos presentes y tampoco quería ser fotografiada en ese momento", contó el fotógrafo.

Se trataba, según Simon, de "su dignidad y su elección. Simplemente respetamos sus deseos y así fue durante toda le cobertura".

A pesar de que quiso hacer pública su situación, "Lydie quiso guardarse algunos momentos para ella".

Para Dimitri, aunque Lydie era claramente una bromista, "el sufrimiento estaba tan arraigado en ella que no necesariamente quería compartir todo con nosotros".

Esto "hizo aún más conmovedor el recorrido que hicimos con ella, ya que nos ofreció la oportunidad de acompañarla, pero sin exponernos a la parte más difícil. La parte más difícil se la guardó para sí misma", contó el videasta.

- Tema divisivo

Más allá de la confianza que se estableció entre Lydie y los dos reporteros de la AFP, la eutanasia sigue siendo un asunto sumamente controvertido, lo que hizo mucho más difícil la cobertura.

"Es tan controvertido que mucha gente no quería aparecer ante las cámaras para no ser asociados con el procedimiento", contó Simon.

También había personas "que cuidaban de Lydie y no querían aparecer (...) Tuvimos que hablar con algunas, para tranquilizarlas. Algunas aceptaron, otras no".

El hospital belga donde se llevó a cabo el procedimiento, por ejemplo, no quiso ser identificado, por temor a recibir una avalancha de llamados para preguntar sobre el procedimiento.

Los dos periodistas querían ser testigos, observadores, manteniendo siempre una cierta distancia con Lydie.

"A pesar del apego que pudimos haber tenido, de todos los momentos que vivimos, de los momentos en que reíamos fuera de cámara (...), teníamos el objetivo periodístico de registrar algo que refleje la realidad", señaló Dimitri.

"Apenas contamos la historia de uno entre decenas de casos de franceses que van a Bélgica cada año para someterse al procedimiento", dijo. "Intentamos mostrarlo con la mayor dignidad y respeto posible".

- Escondidos tras la cámara

Simon y Dimitri admitieron "esconderse detrás de la cámara, en el trabajo", al abordar una situación de tan elevada carga emocional.

Pero de retorno a sus casas, al ver las imágenes que habían captado, sus defensas cayeron.

"Fue un momento extremadamente poderoso. Haber estado allí para presenciarlo, eso te marca para siempre", dijo Simon.

Dimitri, por su parte, afirmó que se sintió conmocionado durante varios días una vez terminada la cobertura. "Me basta mirar las imágenes para que todo vuelva", afirmó. Aún recuerda con intensidad la mirada amable de Lydie, que "nos atravesó a todos".

Los dos jóvenes reporteros dijeron tener la esperanza de haber contribuido a captar algo de una "mujer extraordinaria", así como un poco de la "emoción" de haberla acompañado.

Entrevistas realizadas por Michaela Cancela-Kieffer en Bruselas. Editado por Catherine Triomphe y Fiachra Gibbons en París.

D.Kovar--TPP