The Prague Post - La guerra, último trauma de un Líbano martirizado

EUR -
AED 4.301343
AFN 77.611852
ALL 96.514738
AMD 446.868239
ANG 2.096972
AOA 1074.017289
ARS 1697.403887
AUD 1.766826
AWG 2.11114
AZN 1.995739
BAM 1.956099
BBD 2.35916
BDT 143.251875
BGN 1.956777
BHD 0.442668
BIF 3463.32887
BMD 1.171229
BND 1.514231
BOB 8.094236
BRL 6.490135
BSD 1.171279
BTN 104.951027
BWP 16.475516
BYN 3.442526
BYR 22956.085522
BZD 2.35576
CAD 1.615886
CDF 2996.593612
CHF 0.931783
CLF 0.027188
CLP 1066.568306
CNY 8.246564
CNH 8.23796
COP 4460.039473
CRC 584.989331
CUC 1.171229
CUP 31.037565
CVE 110.281841
CZK 24.338023
DJF 208.581852
DKK 7.472562
DOP 73.371204
DZD 152.341263
EGP 55.872532
ERN 17.568433
ETB 181.965387
FJD 2.67474
FKP 0.874878
GBP 0.875489
GEL 3.144796
GGP 0.874878
GHS 13.453054
GIP 0.874878
GMD 85.500123
GNF 10238.563486
GTQ 8.975371
GYD 245.057422
HKD 9.113976
HNL 30.857712
HRK 7.53616
HTG 153.573452
HUF 386.728509
IDR 19556.008162
ILS 3.75619
IMP 0.874878
INR 104.915577
IQD 1534.434317
IRR 49308.735131
ISK 147.141933
JEP 0.874878
JMD 187.41862
JOD 0.830448
JPY 184.770768
KES 150.983056
KGS 102.424413
KHR 4700.717826
KMF 491.916529
KPW 1054.088924
KRW 1728.453141
KWD 0.359837
KYD 0.976149
KZT 606.152563
LAK 25368.873969
LBP 104891.417505
LKR 362.65538
LRD 207.321659
LSL 19.649501
LTL 3.458335
LVL 0.708465
LYD 6.34897
MAD 10.73654
MDL 19.830028
MGA 5326.813434
MKD 61.5594
MMK 2459.383675
MNT 4159.513473
MOP 9.388034
MRU 46.876158
MUR 54.052655
MVR 18.095929
MWK 2031.110162
MXN 21.121594
MYR 4.775145
MZN 74.845892
NAD 19.649501
NGN 1710.181964
NIO 43.106583
NOK 11.874743
NPR 167.921643
NZD 2.034444
OMR 0.451419
PAB 1.171279
PEN 3.944502
PGK 4.982761
PHP 68.60009
PKR 328.173614
PLN 4.207347
PYG 7858.199991
QAR 4.264489
RON 5.07775
RSD 117.127615
RUB 94.513433
RWF 1705.460433
SAR 4.392871
SBD 9.541707
SCR 17.757712
SDG 704.49846
SEK 10.855305
SGD 1.514755
SHP 0.878725
SLE 28.168488
SLL 24560.087729
SOS 668.202038
SRD 45.023799
STD 24242.072559
STN 24.503742
SVC 10.248565
SYP 12950.403148
SZL 19.647
THB 36.805911
TJS 10.793648
TMT 4.099301
TND 3.428524
TOP 2.820038
TRY 50.065939
TTD 7.950214
TWD 36.91585
TZS 2922.446274
UAH 49.525863
UGX 4189.639781
USD 1.171229
UYU 45.987022
UZS 14081.15027
VES 330.473524
VND 30817.959199
VUV 142.187246
WST 3.266982
XAF 656.057184
XAG 0.017442
XAU 0.00027
XCD 3.165305
XCG 2.111022
XDR 0.815925
XOF 656.057184
XPF 119.331742
YER 279.225162
ZAR 19.652061
ZMK 10542.469351
ZMW 26.501047
ZWL 377.135213
La guerra, último trauma de un Líbano martirizado
La guerra, último trauma de un Líbano martirizado / Foto: Patrick Baz - AFP

La guerra, último trauma de un Líbano martirizado

"¿Cómo está usted?" En el Beirut de hoy, esta pregunta tan banal se responde con un silencio, una sonrisa cansada, a veces con lágrimas. Agotados por años de crisis, aturdidos por la guerra, los libaneses "ya no pueden más", comentan preocupados expertos en salud mental.

Tamaño del texto:

A muchos les marcó un dibujo del ilustrador libanés Bernard Hage: titulado "torta libanesa", representa una tarta de boda con varias capas: "hundimiento financiero, pandemia, explosión en el puerto, estancamiento político, depresión colectiva"... Y la guinda del pastel: la "guerra".

Es el resumen perfecto de lo que atraviesan los casi seis millones de libaneses desde la crisis económica de 2019, "un trauma continuo que nunca se detiene", explica la psicóloga Carine Nakhle, una responsable de la oenegé libanesa Embrace, que desde 2017 trabaja para luchar contra el suicidio.

Sus cerca de 120 operadores reciben llamadas de gente en apuros las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Desde el 23 de septiembre, cuando el enfrentamiento entre Hezbolá e Israel se convirtió en una guerra abierta, las llamadas han aumentado, hasta alcanzar unas 50 al día de media.

"Gente conmocionada, en pánico, muchos de ellos llaman desde zonas bombardeadas, a veces simplemente para preguntar qué hacer", cuenta Nakhle.

Los bombardeos israelíes en el sur y el este de Líbano y en la periferia sur de Beirut, bastiones del movimiento Hezbolá, han dejado más de 1.100 muertos en los últimos quince días y obligado a más de un millón de personas a abandonar sus hogares, según las autoridades.

Beirut, donde se refugiaron decenas de miles de desplazados, cambió de fisionomía en solo unos días, con familias durmiendo en la calle, campamentos precarios y un tráfico aún mayor al habitual.

Cada noche, los incesantes bombardeos de Israel en el suburbio del sur de la capital provocan enormes explosiones, hacen temblar los cristales y dejan el aire impregnado de un horroroso olor a plástico quemado.

Y también despiertan traumas, viejos y no tan viejos: la espantosa explosión del puerto en 2020, la guerra de 2006 entre Israel y Hezbolá y la interminable guerra civil, que se alargó de 1975 a 1990.

- "¿Golpe de gracia?" -

La angustia se extiende más allá de las zonas de guerra, donde los civiles, aterrorizados, lo están pagando caro.

Rita Barotta, una profesora de Comunicación de 45 años, vive cerca de Jounieh, una ciudad cristiana "tranquila" al norte de Beirut. Allí no se siente la guerra pero, aún así, asegura que no tiene "palabras para definir lo que está pasando".

"Ya no sé ni cómo era el 'yo' que existía hace 15 días. Comer, dormir, cuidar de mis plantas, eso ya no existe", explica la mujer, que se ha volcado en la ayuda a los desplazados. "Es otro yo el que funciona. Lo único que existe ahora es cómo puedo ayudar".

Por teléfono, día y noche, encuentra alojamiento para personas que están en la calle, les indica en qué escuelas se pueden refugiar, busca medicinas...

"Si paro cinco minutos, tengo una sensación de vacío total", cuenta Barotta. Ponerse en acción es la única manera de no terminar "abrumada y petrificada".

Para ella, que casi perdió a su madre en la explosión del puerto y que aún recuerda muy vívidamente la guerra de 2006, "lo que ocurre hoy no es solo un trauma que se despierta, es un sentimiento de injusticia inmenso. ¿Por qué vivimos esto? No sé, ¿es esto el golpe de gracia?"

- Somníferos -

Según un estudio realizado en 2022 por la oenegé IDRAAC, pero publicado en septiembre, al menos dos tercios de los libaneses tendría algún trastorno mental.

Depresión, ansiedad, trastornos postraumáticos... "Todos estamos mal, de una forma o de otra", afirma, tajante, Rami Bou Khalil, jefe del departamento de Psiquiatría del hospital Hôtel-Dieu de France, en Beirut.

"Los libaneses tienen una muy fuerte capacidad de resiliencia", asegura, citando la importancia crucial del apoyo familiar, religioso o de la comunidad.

"Pero este fenómeno de acumulación de estrés hace que se colme el vaso... Desde hace años, movilizamos nuestros recursos físicos, psíquicos, financieros. La gente ya no puede más", agregó.

El médico también ha constatado un aumento del consumo de somníferos. "La gente quiere dormir", explica, y tomar una píldora es lo más sencillo cuando uno no tiene ni tiempo ni dinero para ir a consulta.

"Mucha gente no tiene acceso a los servicios de salud mental", apunta Carine Nakhle. Las consultas privadas cuestan unos 100 dólares, un coste que muchos libaneses no se pueden permitir.

"Así que la gente acude a las oenegés", señala. En el centro de salud de Embrace, la lista de espera es de cuatro a cinco meses.

Q.Pilar--TPP