The Prague Post - Activistas luchan por visibilizar la violencia obstétrica

EUR -
AED 4.305347
AFN 79.559727
ALL 96.963528
AMD 446.498005
ANG 2.098197
AOA 1075.01721
ARS 1679.640926
AUD 1.761827
AWG 2.113106
AZN 1.996083
BAM 1.954049
BBD 2.351013
BDT 142.052712
BGN 1.955153
BHD 0.442
BIF 3483.423204
BMD 1.17232
BND 1.500175
BOB 8.065773
BRL 6.317744
BSD 1.167259
BTN 103.209078
BWP 15.642184
BYN 3.951393
BYR 22977.462745
BZD 2.347616
CAD 1.622584
CDF 3362.796186
CHF 0.933874
CLF 0.028443
CLP 1115.815875
CNY 8.345333
CNH 8.346335
COP 4570.873839
CRC 588.380303
CUC 1.17232
CUP 31.066467
CVE 110.165815
CZK 24.349893
DJF 207.865513
DKK 7.464557
DOP 74.39429
DZD 152.089692
EGP 56.532061
ERN 17.584793
ETB 167.601763
FJD 2.622715
FKP 0.864159
GBP 0.865131
GEL 3.153737
GGP 0.864159
GHS 14.240179
GIP 0.864159
GMD 83.815974
GNF 10124.057745
GTQ 8.941949
GYD 244.211171
HKD 9.123107
HNL 30.576992
HRK 7.530393
HTG 152.854988
HUF 391.698328
IDR 19216.6617
ILS 3.901433
IMP 0.864159
INR 103.55743
IQD 1529.155868
IRR 49325.344045
ISK 143.199042
JEP 0.864159
JMD 186.894922
JOD 0.831205
JPY 172.819835
KES 151.041355
KGS 102.519862
KHR 4678.867307
KMF 491.794784
KPW 1055.030237
KRW 1628.556981
KWD 0.35798
KYD 0.972745
KZT 629.306837
LAK 25310.751777
LBP 104528.290244
LKR 352.290336
LRD 214.197152
LSL 20.486056
LTL 3.461555
LVL 0.709124
LYD 6.316394
MAD 10.539856
MDL 19.394539
MGA 5195.41106
MKD 61.484906
MMK 2460.780139
MNT 4216.647854
MOP 9.365668
MRU 46.387028
MUR 53.316745
MVR 18.059571
MWK 2024.112167
MXN 21.668571
MYR 4.933704
MZN 74.909984
NAD 20.486492
NGN 1760.026758
NIO 42.952062
NOK 11.575448
NPR 165.13714
NZD 1.965417
OMR 0.450759
PAB 1.167254
PEN 4.06176
PGK 4.94763
PHP 66.941764
PKR 331.335915
PLN 4.254121
PYG 8361.578823
QAR 4.254769
RON 5.070752
RSD 117.159226
RUB 99.060583
RWF 1691.406035
SAR 4.398103
SBD 9.64089
SCR 17.658014
SDG 705.153148
SEK 10.929013
SGD 1.503119
SHP 0.921259
SLE 27.414712
SLL 24582.951959
SOS 667.110762
SRD 46.626078
STD 24264.647322
STN 24.478379
SVC 10.214022
SYP 15242.360774
SZL 20.476913
THB 37.126775
TJS 11.071432
TMT 4.103118
TND 3.406633
TOP 2.74569
TRY 48.498738
TTD 7.928031
TWD 35.460908
TZS 2883.906138
UAH 48.246186
UGX 4097.328535
USD 1.17232
UYU 46.717939
UZS 14428.071538
VES 184.677336
VND 30935.1677
VUV 140.001741
WST 3.114758
XAF 655.378126
XAG 0.027862
XAU 0.000321
XCD 3.168252
XCG 2.103751
XDR 0.81508
XOF 655.375333
XPF 119.331742
YER 280.910761
ZAR 20.387991
ZMK 10552.276585
ZMW 27.810317
ZWL 377.48641
Activistas luchan por visibilizar la violencia obstétrica
Activistas luchan por visibilizar la violencia obstétrica / Foto: Ander Gillenea - AFP

Activistas luchan por visibilizar la violencia obstétrica

Para Nahia Alkorta, el fallo de un comité de Naciones Unidas que determinó que había sufrido violencia obstétrica al dar a luz a su primer hijo fue un triunfo tras una década exigiendo justicia.

Tamaño del texto:

Diagnosticada con estrés postraumático por lo ocurrido en un hospital en el norte de España en 2012, Alkorta recurrió a la ONU luego de fracasar en los tribunales españoles.

El Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) de la ONU estableció en julio que soportó intervenciones injustificadas que constituían violencia obstétrica, entre ellas una cesárea sin consentimiento, inmovilización de sus brazos y prohibición de estar acompañada por su pareja.

"Desde que ha salido la resolución del CEDAW, más de cien mujeres se han puesto en contacto conmigo diciendo que a ellas también" les ha pasado, relata a la AFP Alkorta, vasca de 36 años.

Es algo "que no se habla por el dolor que genera, por la vergüenza, por el hecho de (pensar que) tendría que ser así", afirma.

El fallo del CEDAW, para quien la violencia obstétrica, un "fenómeno generalizado y sistemático", es aquella "sufrida por las mujeres durante la atención del parto en los centros de salud", pidió a España compensar a Alkorta por los daños físicos y sicológicos y velar porque se respeten los derechos reproductivos de las mujeres en los sistemas de salud y de justicia.

Esta decisión se produjo en momentos en que activistas en Europa buscan visibilizar la violencia obstétrica, muchas veces no reconocida.

Incluso algunas asociaciones médicas ponen en cuestión que pueda hablarse de violencia obstétrica.

"Las mujeres están contando otra historia", replica Alkorta.

- "Totalmente vendida" -

Pesadillas, insomnio, recuerdos traumáticos... Las secuelas para Alkorta fueron muchas tras el calvario que comenzó cuando rompió aguas a la semana 38.

En el hospital en San Sebastián, en el País Vasco (norte), le administraron oxitocina para inducir el parto sin explicación médica, pese a que estaba teniendo contracciones. Según ella, el personal comenzó a ponerse agresivo ante sus preguntas.

Al día siguiente, los ginecólogos decidieron hacerle una cesárea, sin consultarla y pese a que una matrona le aseguró que el parto progresaba.

"Les dije que me explicaran despacio, porque estaba muy cansada, y la explicación fue que sacarían el niño y que eran 40 minutos y listo", señala Alkorta, ahora madre de tres niños.

Con los brazos atados, un protocolo en algunos hospitales durante las cesáreas, y sin su esposo, impedido de acompañarla, sintió que quedó "totalmente vendida".

No fue sino luego de horas que Alkorta pudo abrazar a su hijo, totalmente sano.

En Europa, escasean las estadísticas sobre violencia obstétrica, pero según activistas las mujeres rutinariamente sufren de falta de información, comportamientos groseros o degradantes de parte del personal médico y, en algunos casos, prácticas peligrosas.

Una reciente iniciativa en Serbia para "Detener la violencia obstétrica" recogió 70.000 firmas en cinco días. Una de sus demandas era que el estado costeara un acompañante en la sala de parto, ya que actualmente algunos hospitales públicos cobran por permitirlo.

Según la petición, muchas mujeres en Serbia han sufrido insultos, humillaciones, negligencia y mala praxis médica.

Países como España e Italia han creado observatorios para la violencia obstétrica, pero según los activistas, pocos casos llegan a los tribunales.

"Nos contactan muchas madres que han sufrido partos traumáticos, pero casi ninguna termina presentando una demanda", afirma Nina Gelkova, de la organización búlgara Rodilnitza.

- Consentimiento y respeto -

En sus alegaciones ante el CEDAW, España, que respaldó a la justicia del país que absolvió al hospital, aseguró que no hay partos "a la carta".

"Yo no buscaba un parto a la carta, para nada, yo buscaba un trato humano y no lo recibí", responde Alkorta.

"Yo no estoy en contra de las intervenciones que están justificadas, salvan muchísimas vidas, pero el límite siempre tiene que ser el consentimiento y el respeto", subraya.

Francisca Fernández Guillén, abogada de Alkorta, explica que el personal médico o los familiares pueden minimizar las experiencias traumáticas durante el parto.

"En ocasiones, la pareja o la familia aconsejan a la mujer olvidar lo ocurrido", dice Fernández.

Pero la situación parece estar cambiando.

El vicepresidente de la Federación de Asociaciones de Matronas de España (FAME), Daniel Morillas, indicó que en sus 16 años de trabajo como ayudante de parto ha sido testigo de una toma de conciencia de los derechos de las madres y de su rol activo al dar a luz, aunque piensa que aún queda camino por recorrer.

"Lo primero que tenemos que hacer para luchar contra la violencia obstétrica, es reconocer su existencia", señaló. Por suerte, muchos médicos y matronas "se han dado cuenta de que sí existe y están intentando cambiar", agrega.

E.Cerny--TPP