The Prague Post - El mundo del pueblo inuit se derrite de forma alarmante en Groenlandia

EUR -
AED 4.194736
AFN 79.954208
ALL 96.344542
AMD 438.399578
ANG 2.044198
AOA 1047.399456
ARS 1566.564386
AUD 1.773729
AWG 2.058819
AZN 1.939425
BAM 1.951933
BBD 2.305212
BDT 139.572235
BGN 1.956934
BHD 0.430636
BIF 3360.929055
BMD 1.142202
BND 1.481552
BOB 7.889299
BRL 6.398044
BSD 1.141828
BTN 99.993003
BWP 15.590972
BYN 3.736364
BYR 22387.157002
BZD 2.293336
CAD 1.582127
CDF 3300.963684
CHF 0.928804
CLF 0.028341
CLP 1111.796254
CNY 8.224367
CNH 8.241141
COP 4782.068066
CRC 576.9518
CUC 1.142202
CUP 30.26835
CVE 109.594339
CZK 24.582755
DJF 202.99201
DKK 7.464335
DOP 69.674613
DZD 149.542384
EGP 55.46877
ERN 17.133028
ETB 157.849693
FJD 2.595994
FKP 0.860542
GBP 0.865075
GEL 3.080854
GGP 0.860542
GHS 11.987903
GIP 0.860542
GMD 82.819297
GNF 9908.600769
GTQ 8.76855
GYD 238.864632
HKD 8.966182
HNL 30.096861
HRK 7.542414
HTG 149.821837
HUF 400.071075
IDR 18830.340324
ILS 3.876154
IMP 0.860542
INR 100.077213
IQD 1496.284473
IRR 48100.975071
ISK 142.238319
JEP 0.860542
JMD 182.688029
JOD 0.809838
JPY 172.11036
KES 147.918468
KGS 99.885817
KHR 4585.940269
KMF 492.858198
KPW 1027.917378
KRW 1597.725911
KWD 0.349685
KYD 0.951407
KZT 616.60289
LAK 24648.716418
LBP 102284.179251
LKR 345.023364
LRD 229.582872
LSL 20.570829
LTL 3.372625
LVL 0.690907
LYD 6.185016
MAD 10.39862
MDL 19.659875
MGA 5059.954583
MKD 61.586252
MMK 2397.683027
MNT 4099.756651
MOP 9.231628
MRU 45.482161
MUR 53.283377
MVR 17.604592
MWK 1983.436927
MXN 21.559603
MYR 4.888059
MZN 73.054985
NAD 20.570844
NGN 1748.082545
NIO 41.976288
NOK 11.798654
NPR 159.988604
NZD 1.941299
OMR 0.439179
PAB 1.141728
PEN 4.076499
PGK 4.71758
PHP 66.668077
PKR 323.528491
PLN 4.277412
PYG 8550.982569
QAR 4.158471
RON 5.076975
RSD 117.186474
RUB 92.633026
RWF 1644.770719
SAR 4.284621
SBD 9.416499
SCR 16.156482
SDG 685.901024
SEK 11.184463
SGD 1.482435
SHP 0.897591
SLE 26.270673
SLL 23951.406996
SOS 652.766598
SRD 42.050733
STD 23641.272983
STN 25.042776
SVC 9.990119
SYP 14850.373533
SZL 20.570681
THB 37.473389
TJS 10.766374
TMT 4.009129
TND 3.289352
TOP 2.675149
TRY 46.450721
TTD 7.751573
TWD 34.187472
TZS 2935.458723
UAH 47.625919
UGX 4092.854752
USD 1.142202
UYU 45.789275
UZS 14397.454615
VES 141.315017
VND 29939.966986
VUV 136.267819
WST 3.150783
XAF 654.654163
XAG 0.031209
XAU 0.000347
XCD 3.086857
XCG 2.057723
XDR 0.792014
XOF 647.054873
XPF 119.331742
YER 274.870971
ZAR 20.805299
ZMK 10281.181451
ZMW 26.230798
ZWL 367.788542
El mundo del pueblo inuit se derrite de forma alarmante en Groenlandia
El mundo del pueblo inuit se derrite de forma alarmante en Groenlandia / Foto: Olivier Morin - AFP

El mundo del pueblo inuit se derrite de forma alarmante en Groenlandia

El estruendo de los icebergs que se desploman en las aguas turquesas del este de Groenlandia es la alarma que suena para uno de los ecosistemas más importantes del planeta al borde del abismo.

Tamaño del texto:

El hielo se derrite de manera alarmante y en el pueblo de Ittoqqortoormiit una de las últimas comunidades de cazadores inuit ve amenazados sus ancestrales medios de supervivencia.

El casquete polar de Groenlandia contiene poco más de 8% del agua dulce del planeta, lo que haría subir el nivel del mar siete metros en caso de derretimiento.

Por ello, el cambio climático podría privar a este caserío aislado de su única fuente de suministro de agua potable.

Inviernos fríos, un hielo sólido y una nieve abundante constituyen el medio ambiente natural en el que están acostumbrados a vivir estos inuits establecidos en el estrecho de Scoresby.

En Ittoqqortoormiit, a unos 500 kilómetros de la colonia humana más cercana, solo hay una fuente de agua potable: un río que nace de un lago, él mismo alimentado por un glaciar que se derrite.

"En algunos años quizás no haya más nada", dice Erling Rasmussen, responsable de la gestión del agua para el pueblo en la compañía pública Nukissiorfiit.

El último julio fue el más cálido del que se tenga registro en la estación de investigación groenlandesa Summit Camp, en lo alto del casquete.

"Los glaciares se achican cada vez más", continúa Rasmussen. "Creo que en el futuro para beber el pueblo deberá buscar agua en el océano".

Transformar el hielo en agua potable es costoso, consume mucha energía y es muy aleatorio. Otras pequeñas comunidades aisladas de Groenlandia, como Oqaatsut en la costa oeste, ya optaron por la desalinización.

- Osos hambrientos -

Alrededor del estrecho de Scoresby -el fiordo más grande del planeta- libre de hielo un mes por año, los habitantes dependen durante los interminables inviernos polares de la carne que aportan los cazadores.

Los barcos cargueros solo llegan a Ittoqqortoormiit, en la desembocadura del fiordo, una o dos veces por año. Sus aguerridos marineros tienen que zigzaguear entre inmensos icebergs que solo dejan estrechos pasajes.

"Necesitamos nuestras propias proteínas animales. No podemos contentarnos con comprar carne danesa congelada", explica Jørgen Juulut Danielsen, enseñante y ex alcalde del pueblo.

Pero a medida que el termómetro sube y la banquisa se reduce, la tradicional caza de focas, que consiste en atrapar a estos animales cuando salen a respirar a través de agujeros en el hielo, se vuelve más peligrosa.

El cazador Peter Arqe-Hammeken estuvo a punto de perder a su mujer y sus dos hijos cuando el hielo se deshizo bajo su moto de nieve durante una cacería en enero, a pesar de una temperatura de -20 °C.

Su esposa terminó con un músculo desgarrado tras extirpar al mayor de 12 años del agua helada, cuenta este inuit de 37 años.

Con menos nieve resulta también más difícil utilizar el trineo con perros para cazar al buey almizclero.

Los seres humanos no son los únicos afectados. El debilitamiento de la banquisa empuja a los osos polares hambrientos a entrar en los caseríos en busca de comida.

- Reacciones en cadena -

Anidado entre las montañas rojizas del fiordo de Rode -el "fiordo rojo", un fiordo dentro del fiordo-, los glaciares, cuyas paredes azuladas se levantan desde el mar, son indispensables para el ecosistema.

Las condiciones extremas locales han hecho de este lugar uno de los menos estudiados del planeta.

Tras cinco años de minuciosa planificación, la iniciativa científica francesa Greenlandia se apura para documentar todo lo que se puede en este puesto avanzado del cambio climático, antes de que sea demasiado tarde.

Estas dos últimas décadas, el inmenso casquete glaciar de Groenlandia perdió 4,7 billones de toneladas, contribuyendo por sí solo a un aumento del nivel de los océanos de 1,2 centímetros, estiman científicos daneses especialistas del Ártico.

"Ustedes escuchan hablar del cambio climático, pero aquí lo ven", afirma el jefe de la expedición, Vincent Hilaire, a periodistas de la AFP embarcados en el velero laboratorio "Kamak".

La pesadilla de la científica canadiense Caroline Bouchard, del Greenland Climate Research Centre en Nuuk, la capital de Groenlandia, es que el retroceso de los glaciares condene al estrecho de Scoresby a convertirse en un "ecosistema menos rico".

En efecto, los glaciares que caen en el mar provocan una subida de las aguas, por lo que el líquido de deshielo frío levanta al del fondo del fiordo, rico en nutrientes.

A medida que los glaciares se derriten y retroceden hacia el interior de la tierra, esta mecánica se bloquea.

La escasez de nutrientes pone en marcha una reacción en cadena: menos plancton, por lo tanto menos bacalao polar, y por lo tanto menos focas y osos, fuentes de proteínas esenciales para los habitantes de Ittoqqortoormiit.

- Consecuencias catastróficas -

A bordo del "Kamak", Caroline Bouchard verifica el contenido de sus redes mientras la luz enceguecedora del sol ártico ilumina una miríada de formas de vida marina en su placa de Petri que sirve para cultivar y examinar microorganismos.

En su muestra, en medio de los copépodos, el plancton y pequeños crustáceos kril, el número de larvas de bacalao pasó de 53 el año pasado a apenas ocho este verano boreal.

Si bien la científica explica que se requiere un análisis más profundo de los resultados para determinar las causas de esta disminución, las cifras son a su entender sorprendentemente bajas.

El bacalao polar se encuentra en el "centro del ecosistema" del Ártico, subraya Bouchard.

"Si de repente cae el stock de bacalao polar, ¿Qué pasará con la foca ocelada y el oso polar?", se pregunta.

Las consecuencias, siempre, terminan siendo catastróficas para los habitantes de la zona.

"No es solo Ittoqqortoormiit lo que perdemos. Es un modo de vida único", lamenta Bouchard.

- "Nieve de sangre" -

Nuevas investigaciones llevadas a cabo durante la expedición Greenlandia muestran un panorama sombrío para el futuro de los glaciares: en un fiordo cada vez más caliente, una tintura rojiza se expande en el hielo y la nieve.

Detrás de esta pigmentación apodada "nieve de sangre" se encuentra un tipo de alga, la Sanguina nivaloides, que recién fue identificada científicamente en 2019.

Cuando la nieve se derrite, esta alga se protege de la intensidad luminosa produciendo un pigmento rojo anaranjado. Pero al hacer esto, el nuevo color disminuye la capacidad de la nieve de reflejar la luz del sol, lo que acelera el derretimiento.

Según los estudios, estas algas microscópicas son responsables de hasta el 12% del derretimiento anual del casquete groenlandés, es decir 32.000 millones de toneladas de hielo, una cifra "colosal" para los científicos.

Otro ejemplo de estos fenómenos de aceleración del cambio climáticos: las emisiones de gases de efecto invernadero provocan un aumento de las temperaturas, lo que acelera el derretimiento de los glaciares y favorece el crecimiento de las algas, que a su vez hace que el glaciar absorba aún más rayos solares y calor.

- Repercusiones planetarias -

"Enfrentamos una catástrofe", afirma el francés Eric Maréchal, del Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS) de su país.

A su entender, se necesitarían treinta años para demostrar una tendencia de esta amplitud. "¿Se puede detener a tiempo este proceso? No lo creo", confiesa.

Al acercarse a un imponente glaciar que desciende por un abrupto valle en Vikingebugt (la "bahía de los vikingos"), Vincent Hilaire, el jefe de la expedición, apunta su fusil hacia una huella dejada en el barro por un oso polar.

Para estos investigadores vale la pena arriesgarse a atravesar las tierras de ese animal.

La carrera contrarreloj ante el cambio climático obliga a los equipos del CNRS y del servicio meteorológico nacional francés Météo France a apurarse para recolectar muestras de "nieve de sangre" capaces de ayudarlos a comprender, con datos satelitales, el comportamiento del alga.

"El riesgo que corremos aquí es la desaparición de todo un sistema", explica Eric Maréchal.

"Interesarse por lo que pasa en Groenlandia es también entender la dinámica del desajuste del ciclo del agua a escala planetaria y del gran derretimiento que provoca el aumento del nivel de las aguas de los océanos", concluye.

Q.Pilar--TPP