The Prague Post - "Retrocedimos 50 años", lamentan agricultores de Pakistán tras inundaciones

EUR -
AED 4.264302
AFN 77.085196
ALL 96.591537
AMD 443.089257
ANG 2.078511
AOA 1064.768775
ARS 1685.124603
AUD 1.772874
AWG 2.090059
AZN 1.970453
BAM 1.956186
BBD 2.342482
BDT 142.007383
BGN 1.955825
BHD 0.437696
BIF 3428.177244
BMD 1.161144
BND 1.506197
BOB 8.06559
BRL 6.206544
BSD 1.163064
BTN 104.125975
BWP 15.522461
BYN 3.375665
BYR 22758.420523
BZD 2.339061
CAD 1.626983
CDF 2571.933458
CHF 0.934175
CLF 0.027475
CLP 1077.820153
CNY 8.21132
CNH 8.206785
COP 4424.132447
CRC 572.712903
CUC 1.161144
CUP 30.770313
CVE 110.286742
CZK 24.164392
DJF 207.107071
DKK 7.468396
DOP 72.664325
DZD 151.298812
EGP 55.178599
ERN 17.417159
ETB 181.625551
FJD 2.637886
FKP 0.877851
GBP 0.8798
GEL 3.12929
GGP 0.877851
GHS 13.176598
GIP 0.877851
GMD 84.763479
GNF 10104.992066
GTQ 8.913796
GYD 243.317967
HKD 9.041369
HNL 30.625433
HRK 7.535126
HTG 152.089983
HUF 381.059575
IDR 19307.50084
ILS 3.782014
IMP 0.877851
INR 104.452848
IQD 1523.600358
IRR 48913.186716
ISK 148.394256
JEP 0.877851
JMD 186.562402
JOD 0.823297
JPY 181.043235
KES 150.134597
KGS 101.542344
KHR 4646.916078
KMF 492.325004
KPW 1045.006201
KRW 1705.465262
KWD 0.356495
KYD 0.969191
KZT 594.417182
LAK 25232.865672
LBP 104153.832559
LKR 358.860745
LRD 210.502404
LSL 19.866531
LTL 3.428556
LVL 0.702364
LYD 6.338441
MAD 10.75462
MDL 19.730805
MGA 5196.158605
MKD 61.647153
MMK 2438.703728
MNT 4129.350504
MOP 9.330239
MRU 46.253118
MUR 53.574595
MVR 17.893605
MWK 2016.749682
MXN 21.266577
MYR 4.798423
MZN 74.195655
NAD 19.866616
NGN 1680.837251
NIO 42.798437
NOK 11.792816
NPR 166.600843
NZD 2.03085
OMR 0.446465
PAB 1.163029
PEN 3.910054
PGK 4.997985
PHP 68.09764
PKR 328.589867
PLN 4.238732
PYG 8129.672672
QAR 4.251056
RON 5.088828
RSD 117.418878
RUB 89.701447
RWF 1692.277333
SAR 4.358623
SBD 9.549042
SCR 16.300844
SDG 698.434972
SEK 10.983143
SGD 1.506936
SHP 0.871159
SLE 26.648123
SLL 24348.60494
SOS 663.550812
SRD 44.744098
STD 24033.334478
STN 24.504831
SVC 10.176006
SYP 12838.753644
SZL 19.874431
THB 37.174024
TJS 10.740464
TMT 4.064004
TND 3.42769
TOP 2.795756
TRY 49.25909
TTD 7.883554
TWD 36.466191
TZS 2861.657741
UAH 49.272486
UGX 4186.825378
USD 1.161144
UYU 46.259319
UZS 13887.677971
VES 286.792291
VND 30625.170475
VUV 142.065005
WST 3.251587
XAF 656.103294
XAG 0.020211
XAU 0.000276
XCD 3.138049
XCG 2.096013
XDR 0.815982
XOF 656.106119
XPF 119.331742
YER 276.758783
ZAR 19.870771
ZMK 10451.683745
ZMW 26.662486
ZWL 373.887863
"Retrocedimos 50 años", lamentan agricultores de Pakistán tras inundaciones
"Retrocedimos 50 años", lamentan agricultores de Pakistán tras inundaciones / Foto: Asif HASSAN - AFP

"Retrocedimos 50 años", lamentan agricultores de Pakistán tras inundaciones

"Retrocedimos 50 años", lamenta el agricultor Ashraf Ali Bhanbro, cuyas cerca de 1.000 hectáreas de algodón y caña de azúcar -a punto de ser cosechadas- quedaron destruidas por las inundaciones provocadas por lluvias monzónicas sin precedentes en Pakistán.

Tamaño del texto:

La provincia de Sindh, en Pakistán meridional, está atravesada por el caudaloso río Indo, en cuyas orillas hubo una floreciente agricultura durante milenios, con sistemas de riego establecidos 4.000 años antes de nuestra era.

La región se enfrenta a un doble problema: se registraron precipitaciones récord a nivel local, pero el agua no tiene por dónde fluir, ya que el río Indo se encuentra en su nivel más alto debido a sus afluentes del norte, y desborda en varios lugares.

"En un momento dado, llovió durante 72 horas sin parar", explica Bhanbro, añadiendo que perdió al menos 270 millones de rupias paquistaníes (unos 1,2 millones de dólares) sólo en insumos.

"Ese era el coste de los fertilizantes y los pesticidas. Sin incluir los beneficios, que podrían haber sido mucho mayores porque era una cosecha excepcional", detalla.

A menos que sus tierras puedan ser drenadas, los agricultores como Bhanbro no podrán sembrar trigo de invierno, un cultivo vital para la seguridad alimentaria del país.

Pakistán fue autosuficiente en su producción de trigo, pero más recientemente depende de las importaciones para asegurarse de que sus silos estén llenos, en el marco de sus reservas estratégicas.

- "Estamos perdidos" -

Islamabad difícilmente puede permitirse importar de Rusia grano incluso con descuento, como se está considerando.

El país debe miles de millones a sus acreedores extranjeros, y sólo la semana pasada logró convencer al Fondo Monetario Internacional de que reactivara un préstamo de rescate que ni siquiera puede pagar su deuda externa, y mucho menos hacer frente a los daños causados por las inundaciones, estimados en 10.000 millones de dólares.

La devastación es impactante desde la carretera elevada que une Sukkur con Sammu Khan. En muchos lugares hay agua hasta donde alcanza la vista.

En los campos inundados de cultivos de algodón, las hojas se volvieron marrones y las cápsulas son casi imposibles de encontrar.

Los grandes terratenientes probablemente resistirán a las inundaciones, pero decenas de miles de agricultores se enfrentan a inmensas dificultades. Muchos sólo cobran por lo que cosechan y complementan sus ingresos cultivando alimentos en pequeñas parcelas en pueblos dispersos por la provincia.

Estas también están bajo el agua, y decenas de miles de personas huyeron de sus casas inundadas hacia terrenos más altos.

"No queda nada por cosechar", dice Saeed Baloch, que trabaja la tierra cada temporada con su familia ampliada antes de poner en común sus ingresos.

Los agricultores no son los únicos afectados por las inundaciones. Todos los eslabones de la cadena de suministro también.

"Estamos perdidos", admite Waseem Ahmed, un comerciante de algodón de Saleh Pat que, como muchos en el sector, realizó pagos por adelantado para fijar los precios de compra y protegerse de la inflación y las fluctuaciones del mercado.

"De los 200 maunds (unos 8.000 kg) previstos, sólo se cosecharon 35", informa, añadiendo haber dejado en suspenso sus planes de expansión.

En una pequeña tienda de un mercado algodonero habitualmente bullicioso, dos jóvenes examinan sin entusiasmo un montón de algodón húmedo para ver si se puede salvar algo.

"El mercado está parado e incluso las fábricas de desmotado cerraron", comenta Ahmed.

Ante la abrumadora sensación de impotencia, el algodonero Latif Dinno espera la intervención divina. "Miramos a Alá. Es el último salvador", resume.

O.Ruzicka--TPP