

Tirador mata a dos niños y hiere a otras 17 personas en iglesia de EEUU
Dos niños fueron asesinados por un hombre armado que atacó una iglesia en Mineápolis (norte de Estados Unidos) el miércoles, y otras 17 personas resultaron heridas, entre ellas 14 menores, informó la policía.
El hombre armado "comenzó a disparar un rifle a través de las ventanas de la iglesia hacia los niños que estaban sentados en los bancos durante la misa", dijo a los periodistas el jefe de policía de Mineápolis, Brian O'Hara.
Los niños estaban celebrando la primera semana del año escolar cuando les dispararon en la iglesia Annunciation.
La iglesia se encuentra junto a una escuela afiliada en el sur de la ciudad, la más grande del estado de Minnesota.
"Dos niños pequeños, de ocho y diez años, murieron donde estaban sentados en los bancos", dijo O'Hara, y agregó que otras 17 personas resultaron heridas, incluidos 14 niños.
Dos estaban en condición crítica.
El hombre armado, de 23 años, disparó con un rifle, una escopeta y una pistola antes de quitarse la vida en el estacionamiento, según el jefe de policía, quien añadió que parece haber actuado solo.
El FBI lanzó una investigación por terrorismo y crimen de odio contra los católicos tras el tiroteo, indicó su director Kash Patel.
"El FBI está investigando este tiroteo como un acto de terrorismo doméstico y crimen de odio contra los católicos", afirmó Patel en X. El jefe del FBI agregó que el agresor es un individuo "nacido hombre bajo el nombre de Robert Westman".
Videos supuestamente publicados en línea por Westman mostraron un manifiesto de varias páginas, así como nombres y dibujos de armas de fuego.
El ataque recibió condenas y expresiones de dolor de muchos, incluido el presidente Donald Trump, quien ordenó que las banderas estadounidenses en la Casa Blanca quedaran a media asta.
El papa León XIV -el primer estadounidense en liderar la Iglesia Católica- dijo que estaba "profundamente entristecido" por la tragedia.
Dos adultos y nueve niños, de entre seis y catorce años, estaban siendo tratados en el Centro Médico del Condado de Hennepin, con al menos cuatro personas requiriendo cirugía inmediata.
"Minnesota está con el corazón roto", escribió el gobernador Tim Walz en X.
Imágenes de video en vivo mostraron a padres en pánico recuperando a sus pequeños y huyendo, en medio de una importante respuesta de emergencia.
Testigos y supervivientes hablaron de una escena desgarradora, con el atacante vestido de negro y usando un pasamontañas mientras disparaba, y niños escondiéndose entre los bancos de la iglesia.
"Fue muy aterrador... Nos metimos en los bancos y él disparó a través de las ventanas de vitrales", dijo un niño de quinto grado que sobrevivió al ataque a la estación local de televisión Fox 9.
Un amigo "estaba encima de mí (...) asegurándose de que yo estuviera a salvo, y él fue alcanzado (por un disparo). Así que eso fue realmente valiente de su parte", dijo.
- Una tragedia sin fin -
"Esto fue un acto deliberado de violencia contra niños inocentes y otras personas que rezaban. La pura crueldad y cobardía de disparar en una iglesia llena de niños es absolutamente incomprensible", reflexionó el jefe de policía O'Hara.
"Nuestros corazones están rotos por las familias que han perdido a sus hijos, por estas jóvenes vidas que ahora luchan para recuperarse, y por toda nuestra comunidad que ha sido tan profundamente traumatizada por este ataque sin sentido", agregó.
El ataque del miércoles es el último de una larga lista de tiroteos escolares en Estados Unidos, donde las armas superan en número a las personas y los intentos de restringir el acceso a armamento enfrentan un eterno estancamiento político.
"No digan que esto se trata de pensamientos y oraciones en este momento. Estos niños estaban literalmente rezando. Era la primera semana de escuela. Estaban en una iglesia. Estos son niños que deberían estar aprendiendo con sus amigos", lanzó el alcalde de Mineápolis, Jacob Frey, en rueda de prensa.
El ataque llega después de una ola de informes falsos de tiradores activos en campus universitarios de Estados Unidos mientras los estudiantes regresan a clases después de las vacaciones de verano.
Pero este año ha habido al menos 287 tiroteos masivos en el país, definidos como uno que involucra al menos cuatro víctimas, fallecidas o heridas, según el Archivo de Violencia Armada.
Al menos 16.700 personas murieron por violencia armada en Estados Unidos el año pasado, sin incluir los suicidios.
Y.Havel--TPP